miércoles, 9 de septiembre de 2015

Con ustedes a morir

Con ustedes a morir

Fin de un nuevo año compartido y vivido en Nacional. Fin de un año difícil, donde no le encontramos la vuelta, y todo queda resumido en una mala temporada y listo.


Si esperan una columna dando palo, creo que saben que aquí nunca la van a encontrar. Primero porque en lo personal creo que más allá de rendimientos individuales hay un equipo, que por más que ellos son los que visten la camiseta, no son los únicos culpables de una mala temporada, porque para mi eso fue este año, “una mala temporada” y no mucho más que eso.

Segundo, que no creo que ningún jugador  salga a la cancha a no ganar. No creo que ninguno de los 14 que este año entrenaron noche a noche en Welcome lo hicieran para perder. Acá hay gente que siente la camiseta. Son momentos, quizás no todos tuvieron un rendimiento parejo durante el campeonato y sus momentos individuales no se conjugaron para lograr el rendimiento de equipo que necesitábamos.

Me voy a quedar como siempre con lo bueno, que a mí me deja cada campeonato, los momentos, las sonrisas, las alegrías, los festejos, las dedicatorias, las personas que se encuentran detrás de cada jugador. El compañerismo, el sacar la cara por el otro, el grupo unido. Ellos son los que se bancan todo, los insultos, el poco reconocimiento y parece que fueran los únicos responsables de un año para el olvido. Yo los aplaudo pero no porque no me importe que a Nacional le vaya bien, amo esto y lo que más quiero es ver al bolso en lo más alto, pero cuando no se puede, no se puede y listo. Los aplaudo por la paciencia, que este año fue muchísima.

Empiezo a agradecer, primero que nada a ellos que me abrieron las puertas un año más, que me hicieron sentir parte del grupo como cada temporada y respetaron nuestro laburo como nadie y eso vale oro.  Gracias Nacho Cambón, Abel Agarbado, Juan Zaballa, Sergio Castello, Cococho Álvarez, Marcelo Pérez, Martin Marenales, Nacho Guerra, Mateo López, Johnny Rodríguez. Paulo Rodríguez, Piero Manfredi, Jimmy Boston y Anthony Johnson.

A los dirigentes, sabemos del esfuerzo que se hace cada año para poder poner un equipo en la cancha, a veces las cosas no se dan y listo. A todos los que apoyan y aman esto tanto como nosotros, gracias.

A Diego Castrillón, Rodrigo Marín, Quique Berhouet y Agustín Fraga, un gran pero gran cuerpo técnico que tuvo que irse muy temprano este año. Gracias por el respeto, por la buena onda, por la ayuda cuando la necesitamos. Muchas veces solo se ve lo malo pero nosotros que vivimos desde adentro cada practica de la pre-temporada y del comienzo del campeonato podemos dar fe de que laburar se laburo, no se dieron los resultados, pero las cosas se hicieron bien. Espero de corazón verlos dirigir nuevamente a Nacional.

Al Kine de Nacional, Andrés Delgado. A veces uno no ve a las personas que están detrás de cada lesión y nosotros sin duda tenemos al mejor Kinesiólogo. Un gran tipo, que genera confianza, que esta aunque nadie lo vea, y que no llego a donde está por casualidad. Gracias Kine por ser mi gran apoyo este año.

Gracias Gonzalo Vieites por la ayuda, por gestionar nuestra entrada a los partidos difíciles, por toda la información del día a día. Gracias por tenernos en cuanta siempre.

A la hinchada que nunca abandono, que estuvo cada partido, aun cuando sabíamos que no había chance.

Fue un año muy difícil para nosotras también como equipo de transmisión, empezando por una federación que se cree con el derecho de decirnos quien puede y quien no trabajar. Siguiendo por el tema económico que nos dejo un tiempo fuera de las canchas. Agradecer a los que estuvieron apoyando, a los colegas que nos bancaron con nunca, a los jugadores que siempre estuvieron brindando apoyo y a la gente que desinteresadamente nos ofreció ayuda. Se valora cada palabra. Cuando los tiempos son malos una simple palmada en la espalda alcanza para calmar un poco el dolor de no poder hacer lo que uno más ama.

Gracias Marcel Rigali y Diego López, compañeros de fierro. Responsables, comprometidos con la causa, siguiendo la misma línea de laburo que uno, estén o no de acuerdo con eso. Fue un placer cada partido compartido, cada entrenamiento. Gracias por laburar intensamente por Nacional.

Y por último quiero dar mi opinión con respecto a nuestra continuidad en el metro, uno siempre quiere subir, pero hay que ser consciente que hoy Nacional no está en condiciones de hacerlo. Económicamente es imposible enfrentar una liga, ya se hace difícil para el metro, imagínense para algo de más categoría. El hincha tendría que entender eso. Hoy tenemos que poner énfasis en terminar la cancha, en darle a nuestras formativas el lugar que se merecen. Necesitamos sacar jugadores de nuestra cantera, necesitamos que practiquen en condiciones dignas y que no se vayan a otros clubes por esa razón.  El día que tengamos una chancha donde practicar, un lugar donde se unan las generaciones. Jugadores nuestros que implique no tener que andar armando planteles nuevos todos los años. Un técnico con continuidad, que no se ajuste a los resultados del momento, sino a los proyectos a largo plazo. El día que logremos un Nacional integrado, donde cada parte este relacionada y sea tan importante como la otra, ese día podemos empezar a soñar con volver a la Liga, antes de eso, en mi opinión, es inútil.


Gracias a todos! Nos vemos en el 2016

Andrea Ramondino
Somos Basket Nacional